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Nieve a contratemporada

Elegir una semana de esquí en un destino de Europa o Estados Unidos dejó de ser una opción exclusiva para fanáticos. Aquí les contamos cuáles son los enclaves más buscados y les damos todos los tips para que se atrevan a planear unas vacaciones diferentes en destinos no tradicionales.

Los viajeros que eligen disfrutar de la nieve en enero ya no son solamente expertos esquiadores ni fanáticos de la nieve. Hoy muchas familias, parejas o amigos que agregan a sus viajes a Estados Unidos o Europa algunos días en un centro de esquí del hemisferio norte. Es que en estos destinos no encuentran solo nieve, sino también diversión, buena gastronomía y muchas actividades para todos los gustos.

Entre esquiar en Estados Unidos o Europa y hacerlo en el hemisferio sur, hay algunas diferencias. Se podría empezar por las geográficas: las superficies en el hemisferio norte son muchísimo más extensas; esto, sumado a la cantidad de medios de elevación –que hace que prácticamente no existan las filas– permite pasar muchas más horas del día esquiando. Además, los centros de esquí están muy cerca de las grandes urbes y en muchos casos se puede combinar la actividad con interesantes visitas.

Con una arraigada tradición ligada a la nieve, los centros de esquí del norte tienen además mucha más estructura que la que se encuentra en nuestro hemisferio. Por eso, en la montaña, la cantidad de actividades y servicios invitan a permanecer más tiempo allí sin tener que regresar a la base. En las bases, villas o ciudades, según el caso, la cantidad y diversidad de hotelería, restaurantes y entretenimiento aseguran la diversión para todos y hacen que los centros sigan teniendo vida propia más allá del invierno.

Pero, ¿cuál elegir? Aquí nuestro top five para quienes ya sueñan con escapar del calor del verano austral para disfrutar de la nieve en el otro hemisferio.

EL TOP FIVE.

1- Aspen: conocido como “la Meca del esquí” de Estados Unidos, este centro de esquí es uno de los más famosos y completos del continente. La ciudad tuvo sus orígenes como un campamento minero alrededor de 1880 y, aunque desde hace unos 50 años es reconocido como centro de nieve, aún conserva suntuosas construcciones victorianas e invita a recorrer sus pintorescas calles. Entre las sorpresas que encontrará el viajero se cuentan restaurantes de nivel internacional, tiendas de todas las marcas conocidas, cines y hasta 62 galerías de arte. Aspen está compuesto por cuatro montañas –Aspen Mountain, Aspen Highlands, Buttermilk y Snowmass– a no más de 10 minutos una de otra, todas conectadas entre sí por un sistema de transporte interno. Incluso cuando se alquila equipo, se puede informar en qué montaña va a esquiar al día siguiente, y el equipo lo aguardará donde lo haya solicitado (www.aspensnowmass.com).

2- Vail: otro de los íconos del esquí en el hemisferio norte, Vail es la montaña más grande del estado de Colorado, con más de 40 km² esquiables sobre las montañas Rocosas. El centro de esquí se desarrolló a partir de la montaña y cuenta dos villas principales, Vail Village y Lionshead, que se pueden recorrer a pie. Entre esas dos bases se disponen una gran cantidad de hoteles que dan sobre las pistas y conforman Vail Resorts. El destino está integrado por cuatro centros de esquí (Vail, Beaver Creek, Breckenridge y Keystone) distanciados uno de otro por un máximo de 40 minutos en auto. Cada uno cuenta con su hotelería y servicios, pero conviene saber que con un mismo pase se puede esquiar en los distintos centros. En la montaña se ofrecen además diversas actividades de entretenimiento, desde patinaje sobre hielo hasta bicicletas para nieve o toboganes helados (www.vail.com).

3- Andorra: un clásico en Europa, con una historia de muchos años para los argentinos y uno de los favoritos nacionales por ser un centro de esquí que apunta esencialmente a la diversión. Este pequeño principado (468 km2) sobre los Pirineos, entre España y Francia, se caracteriza por tener abundante nieve y muchos días de sol. Cuenta con dos estaciones de esquí, Grandvalira y Vallnord, con capacidad para trasladar entre ambas 156 mil esquiadores por hora. Se destaca por sus propuestas de ocio y entretenimiento, su oferta cultural y la gastronomía; pero sobre todo por su excelente vida nocturna, con los mejores bares, pubs y discotecas, donde la animación sigue hasta bien entrada la madrugada: el lugar ideal para los que piensan en pasarla bien. Además, se encuentra muy cerca de Barcelona –a menos de tres horas en auto– con lo cual las opciones de actividades son múltiples (www.skiandorra.ad).

4- Courchevel: conocida como la montaña de los Tres Valles, en los Alpes franceses, es el área de esquí más grande del mundo y quizá una de las más lujosas. Allí convergen tres centros principales: Val Thorens, Meribel y Courchevel, a los que se suman también otros pueblos cercanos para ofrecer más alternativas al viajero. Con el típico estilo francés, este destino propone el “saber vivir”, y para eso cuenta con 70 restaurantes, siete de ellos con estrellas Michelin, 32 spas y más de 100 tiendas donde abunda el buen gusto; a medida que se asciende por la montaña, el lujo y los precios aumentan. Muchos de sus hoteles, de diversas categorías, tienen acceso directo a la nieve. Además de 311 pistas para todos los niveles, cuenta con zonas para principiantes, Pueblos de Niños con instructores, actividades y guarderías; y áreas temáticas de esquí lúdico que aseguran la diversión para todos (es.courchevel.com).

5- Baqueira: en el Pirineo catalán, Baqueira es considerada una de las mejores estaciones de esquí de España –con nevadas abundantes y de gran calidad–, además de ser uno de los centros de esquí más buscados por los argentinos. Está localizada en el valle de Arán, uno de los sitios con más encanto en Cataluña, rodeado de cumbres de 3.000 m. y sembrado de grandes lagos. Elegida por los ricos y famosos de España, cuenta con excelentes servicios y un destacado patrimonio artístico y cultural. Entre las actividades para realizar después del esquí se destacan la visita a las termas de Tredós o de la Baronia de Les; o el recorrido por Vielha, capital de la comarca. Cuenta con 78 pistas de todos los niveles en 127 km. esquiables que se dividen en “safaris” azul, rojo o negro, de acuerdo con su grado de dificultad. También hay snowpark, parques infantiles para los más chicos y hasta heliesquí para los más arriesgados (www.baqueira.es).

10 TIPS DE UN EXPERTO

Para quienes ya sueñan con animarse a la nieve a contratemporada, aquí los tips de un experto, Marcelo Bottino, presidente de la mayorista OTE –empresa especializada en esquí, con más de 45 años de trayectoria en el mercado–.

• Anímese: esquiar en el hemisferio norte ya no es para expertos. Hay quienes combinan sus visitas a destinos de Europa o Estados Unidos con días de playa, y otros que prefieren hacerlo con una semana de diversión en la nieve. ¡Atrévase!

• Cuando ir: la temporada ideal es a fines de marzo, cuando se puede encontrar muy buena nieve a tarifas más económicas y las temperaturas no son tan rigurosas. Además es época de grandes liquidaciones para las compras. Y si planea combinar el viaje con visitas a otros destinos, también podrá disfrutarlos mejor con temperaturas más benignas. Quienes no puedan viajar en ese momento, deben considerar que durante las fiestas de Navidad y Fin de Año los costos aumentan por la mayor demanda de locales. Desde el 5 o 6 de enero es más económico; mientras que en febrero se encarece nuevamente.

• Reserve antes: conviene reservar con anticipación. En abril ya hay reservas tomadas para diciembre, enero y febrero. ¡No falta tanto!

• Llegar es rápido: las compañías aéreas que vuelan al hemisferio norte ofrecen muy buenas conexiones hacia los centros de esquí, con lo cual la llegada a destino se hace rápida y sencilla. Los traslados regulares o los alquileres de auto están también muy bien organizados.

• No es tan caro: aunque las tarifas son en dólares o euros, la gran competencia entre la enorme oferta de servicios hace que los precios sean similares a los que se pueden encontrar en Sudamérica.

• Se aprovecha más: debido a la cantidad de superficie esquiable, quienes ya han esquiado en el sur deben saber que en un mismo lapso de tiempo en el norte se aprovechan muchas más horas de esquí

• Todo resulta fácil: en todos los centros hay gran cantidad de personal a disposición para atender a los viajeros, incluso en español, con lo cual el idioma ya no es una barrera. Los pases y la accesibilidad también son claros y sencillos de adquirir.

• Hace mucho frío: el invierno del norte es más riguroso que en los centros de esquí nacionales, especialmente desde fines de diciembre hasta mediados de febrero. Es importante tener en cuenta este detalle para planificar el abrigo y el equipamiento necesarios.

• Cuidado con el exceso de equipaje: conviene averiguar los límites de equipaje permitido y costos de valijas extra de acuerdo con la política de cada aerolínea en caso de llevar o comprar equipos.

• Lleve asistencia al viajero: es necesario contar con una tarjeta de asistencia porque el seguro del esquiador de los centros contempla solamente los primeros auxilios y la salida del esquiador de la montaña. En el hemisferio norte la medicina es muy cara y cualquier incidente, aunque sea menor, puede tener grandes costos.

Informes: www.otetravel.com.ar / Facebook: OTE SKI / Twitter: @skiote.

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