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Malta

Delicada belleza en el Mediterráneo

A pesar de sus pequeñas dimensiones, y de ser un destino secundario en las ofertas tradicionales de las agencias de viajes, este país esconde magníficos tesoros naturales y sitios arqueológicos de gran relevancia histórica que, junto a otros numerosos atractivos, conforman una oferta sumamente interesante para aquellos que tenemos la avidez de descubrir territorios.

Situada a menos de 100 km. de Sicilia y a 300 km. de la costa africana, la República de Malta está compuesta por tres islas habitadas: Malta (246 km²), Gozo (67 km²) y Comino (3 km²), esta última con una mínima población.

Caracterizado por tener una costa rocosa, el territorio presenta una atrayente mezcla entre pasado y presente, además de una fascinante fusión de las culturas europea, mediterránea, árabe y africana.

Colonia británica hasta su independencia en 1964, actualmente es miembro de la Unión Europea y cuenta con tres sitios considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: su capital, La Valeta; los templos megalíticos y el Hipogeo Hal Saflieni.

Entre los templos figuran los de Ggantija, en Gozo, que datan de la Edad de Bronce, lo que los transforma en los monumentos más antiguos del mundo que se mantienen en pie.

En tanto, el Hipogeo Hal Saflieni es un complejo subterráneo excavado en la roca y utilizado por sus constructores como santuario y lugar de enterramiento.

Con relación a La Valeta, cuenta con 320 monumentos, todos localizados en un área de 55 ha., lo que la convierte en una de las zonas históricas más concentradas del orbe.

LA VALETA, ENCANTO CAPITAL.

Situada sobre una península en la zona centro-oriental de la isla, la capital de Malta se caracteriza por sus construcciones barrocas con elementos de las arquitecturas del Renacimiento, Neoclásica y Moderna.

Entre los edificios históricos sobresalen la Catedral de San Juan y el antiguo Palacio del Gran Maestre, que actualmente alberga el Parlamento y el Museo Nacional de Bellas Artes.

En La Valeta también abundan los museos, que el turista puede visitar para adentrarse en la historia del país. Por ejemplo, el Museo Nacional de Arqueología atesora una excepcional colección de objetos del período neolítico. A la vez, pueden apreciarse las salas de la Edad de Bronce, con objetos de las culturas fenicia y romana y el período medieval.

Otro establecimiento de interés es el Museo Nacional de Bellas Artes, que atesora una colección de memorabilia relacionada con la estadía en Malta de la Orden de los Caballeros de San Juan.

La ciudad –emplazada en un promontorio rodeado de murallas desde el que se obtienen maravillosas vistas del mar– mide menos de un kilómetro cuadrado y se puede recorrer tranquilamente a pie.

Su característica principal son los callejones y escaleras, lo que obliga a utilizar calzado cómodo. Durante el recorrido es posible apreciar magníficas plazas y palacios barrocos. Vittoriosa, antiguo cuartel general de los caballeros de la Orden, es actualmente un barrio residencial con numerosos edificios históricos abiertos al público, como el Palacio del Inquisidor y el Museo Marítimo. También es conveniente conocer el Palacio del Gran Maestre, la mencionada Concatedral de San Juan, con un espectacular suelo formado por 400 lápidas de mármol dedicadas a los caballeros de la Orden; y el Fuerte de San Telmo.

En contraste con la pequeña localidad, el Gran Puerto es posiblemente el más impresionante del Mediterráneo.

ECOS HISTORICOS Y EXCURSION A GOZO.

Uno de los lugares más espectaculares de Malta es el Hipogeo de Hal Saflieni, situado en el municipio de Paola, en el sureste de la isla.

Fue esculpido como cavidad subterránea y consta de salas, cámaras y pasadizos excavados en roca viva distribuidos laberínticamente en una superficie de unos 500 m², donde abundan abalorios, huesos humanos, amuletos y estatuillas.

El complejo –descubierto por accidente, en 1902– está agrupado en tres niveles. El nivel superior (3600-3300 a.C.) consta de un gran pasadizo central y cámaras funerarias a ambos lados. El nivel medio (3300-3000 a.C.) contiene varias cámaras con un acabado muy liso; y el nivel inferior (3150-2500 a.C.) destaca por contener una habitación a casi 11 m. por debajo de la superficie de la calle.

En cuanto a Gozo, es la segunda isla en tamaño del país y está situada a 6 km. al noroeste de la isla de Malta, caracterizándose por sus preciosas bahías y acantilados, iglesias barrocas, la urbe amurallada de Victoria y templos prehistóricos. Para llegar hay que tomar el transbordador que cruza el canal de Il-Fliegu, desde Marfa Point, en la costa occidental.

Uno de los lugares más deslumbrantes es la Azure Window, también conocida como “la Ventana Azul”. Se trata de una formación rocosa natural que forma un arco que simboliza una ventana al mar. Lo recomendable es conocerla a través de un paseo en barco, ya que así es posible apreciar todos sus rincones. Es, además, uno de los lugares favoritos de los buceadores expertos, debido a que tiene uno de los fondos marinos más ricos de la zona.

En Gozo también hay propuestas de trekking, senderismo, mountain bike y escalada, a la vez de poder visitarse la cueva Calypso y los templos de Ggantija.

COMINO, PARAISO NATURAL.

Entre Malta y Gozo se encuentra Comino, un paraíso para los amantes del esnórkel, el buceo, el surf y el senderismo. Prácticamente deshabitado –sólo funciona un resort– y sin tránsito automotor, es un verdadero edén de la naturaleza donde el turista puede gozar de una inigualable tranquilidad. Su mayor atracción es la Laguna Azul, un espacio de brillantes aguas cristalinas rodeado de arena blanca, ideal para hacer playa o recorrerla en barco. También se pueden visitar otras playas y, entre los edificios, la Torre de Santa María, construida en 1618.

Para complementar la estadía, nada mejor que conocer algunas de las restantes ciudades del país. Entre ellas, Birkirkara es la más grande de Malta y la más poblada en los últimos 15 años. Algunos de sus lugares de interés son su jardín público, los acueductos cerca de Miehel y la hermosa basílica de St. Helen.

En tanto, Sliema es un centro de compras, restaurantes y cafeterías, y la zona donde se encuentran los hoteles más modernos.

También están Conspicua, Senglea y Vittoriosa, tres pequeñas ciudades situadas frente a La Valeta. Separadas entre sí por lagunas de mar, conforman la zona denominada Cottonera. Son más pequeñas que La Valetta, especialmente Senglea, y sus calles no tienen el aspecto comercial o señorial de las principales de la capital, pero entre ellas abundan edificios de interés, como la iglesia de San Lorenzo en Vittoriosa; o el Palacio del Inquisidor, compuesto por un laberinto de pasillos y celdas. Desde cada una de las penínsulas se tienen muy buenas vistas de la otra y, por supuesto, de La Valeta.

En cuanto a Mdina, es una ciudad amurallada situada sobre una colina. Antiguamente se la llamó Citta Vecchia y fue la capital del país hasta 1570. Es comúnmente conocida como “La ciudad del silencio”, caracterizándose por sus bellos palacios y edificios religiosos del siglo XV. Un recorrido por sus calles incluye las visitas a la Catedral de San Pablo, los soberbios palacios de Vilhena y Falson, las capillas de Santa Ágata y San Nicolás, el Museo de Historia Natural y la iglesia y convento Carmelita.

TIPS PARA EL VIAJERO

Cómo llegar: el Aeropuerto Internacional de Malta (MLA) –ubicado a 10 minutos de La Valeta– tiene conexión directa con casi todas las grandes ciudades europeas. Air Malta vuela desde algunas de ellas, Alitalia lo hace desde Roma e Iberia desde Madrid (de junio a septiembre).

También se puede llegar con British Airways, Air France y Lufthansa, entre otras; y con compañías de bajo costo como EasyJet, Vueling y RyanAir. A la vez existe la opción de viajar en ferry desde Sicilia.

Cómo moverse: existe un servicio público de buses en Malta y Gozo que es muy recomendable. También está la posibilidad de alquilar un auto o moto, pero hay que tener en cuenta que se maneja por la izquierda. Para viajar de una isla a la otra opera un ferry. En la capital uno se puede manejar a pie, teniendo en cuenta que tiene muchoas escaleras, lo que obliga a utilizar calzado cómodo. 

Dónde alojarse: en el territorio hay hoteles de todas las categorías y para todos los presupuestos, aunque sobresalen los establecimientos de alto nivel. Una opción interesante es el señorial Corinthia Palace Hotel & Spa, a 10 minutos de La Valeta. En temporada baja, de noviembre a marzo, las tarifas son considerablemente más bajas.

Clima: la temperatura promedio es de 18°. En agosto puede llegar a superar los 40°. Los mejores meses para disfrutar del destino son mayo y junio, y septiembre y octubre. 

Idioma: maltés, inglés e italiano.

Moneda: euro.

Informes: www.visitmalta.com.

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